A las ocho recogí a Pablo en su casa y salimos hacia la sierra norte de Madrid.
Tras aparcar en un pequeño parking, cogimos el dorsal y nos fuimos a tomar un café....
Había poquísima gente, a pesar que faltaba muy poco tiempo para la salida.
A las diez y media pasadas, se dio la salida de unos 38 corredores, parecía más un entrenamiento que una carrera.
Salimos en grupo hasta la salida del pueblo, donde cogimos preciosos caminos que iban en dirección a la montaña.
Ya en el kilómetro dos el grupo se iba alargando, ya que subíamos por rampas con más pendiente.
Lo más duro vendría en el kilómetro 6, donde se subía una fuerte pendiente de las que hay que hacerlo casi gateando.
Lo peor de todo fue que el juez no se colocó en el cruce de bajada, (por pura perrería ya que estaba fondón) y un grupo de corredores entre las que se encontraban las cuatro primeras mujeres de la carrera, continuamos subiendo la montaña. Tras mas de un kilómetro de fortísimo ascenso por las rocas, vimos que no había ninguna señal, y decidimos reagruparnos para ver que hacíamos.
El cabreo de varias chicas era grandisimo, ya que habían perdido toda posibilidad de ganar la prueba.
Rebeca de nuevo no se encontraba bien, y cada vez que el recorrido picaba hacia arriba, se ponía a caminar, pero no se alejó en ningún momento de las otras tres mujeres.
Al final, encontramos el camino de vuelta, tras pasar un fuerte descenso muy técnico de pura montaña...
Los últimos kilómetros fueron muy bonitos, entre caminos con muchos toboganes, grandes cambios de materiales y muchos árboles.
La entrada en meta fue un poco entre alegría y cabreo, yo expresé mi enfado a todos los jueces de la federación de atletismo, aunque si os digo la verdad, creo que se la sudó....
Después la organización del pueblo, nos sorprendió con una gran barbacoa y refrescos para todos los corredores y acompañantes..
Como me lo había ganado, me tomé unas cuantas cervecitas con limón, en vez de coca cola y naranja de la organización, lo que se que estaba buenísimo, eran: los chuletones en trocitos, morcillitas de pueblo, choricitos, panceta y alitas de pollo a la barbacoa.
Después fue la entrega de premios.
Pablo quedó tercero de su categoría y Rebeca primera de Veteranas.
La medalla de Rebeca me dejaron entregársela a mi |
Rebeca entregó las medallas a la categoría de Pablo. |
Felicidades nuevamente, siempre la tienes ahí subida.
ResponderEliminarSiiiiiii, siempre en el palomar, ja ja ja....
ResponderEliminarAyer hubo muy pocas mujeres, estaban todas federadas, y Rebeca no lo era, asi que jugó con ventaja..... lo peor es que nos perdimos por la montaña, las cuatro primeras mujeres y unos cuantos hombres, hicimos 3 kilómetros màs, asi que llegamos un poco tarde a meta.
un saludo